La respuesta radica en que se trata de una enfermedad silenciosa, sin manifestaciones evidentes a través del tiempo, que acarrea importancia no solo en la población de riesgo para enfermedad renal, como trastornos genéticos o heredo familiar, sino en la población general. Al evaluarla de forma regular se tiene la posibilidad de un diagnóstico temprano y una intervención certera, eficaz y preventiva.
El desarrollo y la función de los riñones son de vital importancia para la regulación de líquidos y desechos del organismo. Cualquier evento que altere la fisiología normal a nivel glomerular o tubular, producirá una perdida en la función renal para filtrar o depurar sangre. En la disfunción renal podremos encontrar en los resultados del laboratorio aumento o ausencia de líquidos, electrolitos, proteínas, sangre, glucosa etc.; Uno de los componentes más importantes a evaluar es la creatinina en suero y sangre.
Una falla renal puede alcanzar tal severidad que sea necesario el trasplante de riñón. La retención de líquidos y producción de desechos puede causar la muerte por coma ácido, debido a los altos niveles de compuestos nitrogenados y ácidos corporales. La hemodiálisis se realiza con el fin de buscar un balance electrolítico y limpiar desechos mientras se espera por el trasplante de riñón.
Por todo lo anterior, es de importancia realizarse un chequeo general de forma periódica y monitorear la función renal para evitar llegar a casos extremos como lo es la hemodiálisis y el transplante.
¿Por qué es importante evaluar la condición renal?
